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Turismo Religioso: San Luis y sus destinos de fe

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Los paisajes sanluiseños albergan templos, santuarios, vía crucis, capillas, y monasterios. Espiritualidad y tradición popular convergen para generar una identidad en las sierras centrales, el norte provincial, el Corredor de Los Comechingones, el Valle del Conlara, El Morro y el sur provincial.   

El ministerio de Turismo y Cultura invita a turistas y vecinos a recorrer los destinos del Turismo Religioso que envuelve cada rincón de la provincia.


 

El turismo religioso es una oferta complementaria de los atractivos naturales y tradicionales del destino. Con el paso del tiempo, San Luis se constituyó como un lugar por excelencia para esta especialidad, a partir de la revalorización de diferentes circuitos y espacios. El desafío es que los turistas y vecinos descubran los lugares que motivan la fe, transitando estos caminos sanluiseños para encontrar a Dios, cruzando ríos, valles, antiguos pueblos mineros y rurales, médanos, sierras, viejas estaciones ferroviarias, espejos de agua y sinuosos caminos.

Entre los sitios más emblemáticos en la capital de San Luis se encuentran la Catedral, fundada en 1883, el antiguo Templo Santo Domingo y la Iglesia de la Virgen del Rosario del Trono, cuya arquitectura invita a pasear por el siglo XVIII. En La Carolina, Nuestra Señora del Carmen fue construida por jesuitas. Otras órdenes como dominicos, salesianos o mercedarios también cimentaron varios templos en nuestra ciudad.

El Santuario de Renca y el Cristo de la Villa de la Quebrada son las fiestas religiosas que más fieles, incluso de otros países, convocan. Los Vía Crucis de El Morro y Merlo también atraen a multitudes, que aparte de rezar, aprovechan para grabar en sus retinas las sierras sanluiseñas.

Detrás de la iglesia Nuestra Señora de la Guardia, hay un Vía Crucis que recorren los sacerdotes del Seminario Mayor San Miguel Arcángel. También es imperdible la visita a los monasterios de El Suyuque y Carpintería, que abren sus puertas todo el año, los oratorios en la Sierras de los Comechingones, el santuario de la Medalla Milagrosa, la centenaria parroquia San Roque con su Cristo de 1800 en Villa Mercedes, el pesebre de la iglesia en Potrero de los Funes, o las comunidades Huarpes y Ranqueles.

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