El pasado sábado por la mañana se realizó en un predio cercano a la Ciudad una suelta de palomas mensajeras fue en el marco de un evento de carácter nacional organizado por la Federación colombófila Argentina. Por primera vez se hizo un evento de este tipo en Huinca Renancó.
El sábado a las 8,15 hs de la mañana las palomas fueron liberadas dando un gran espectáculo que pudo ser apreciado por quienes se llegaron al lugar o pasaban casualmente por Ruta provincial 26.
Según explicó a Cabledigital, Esteban, el encargado de trasladar las 3.500 palomas hacia el punto de suelta, (Predio frente a la AGD, a unos 2.000 hacia el noreste de Huinca), las palomas luego de ser liberadas recorren alrededor de 600 kilómetros hacia sus palomares en diferentes destinos en Buenos Aires.
A su regreso se comprueba con relojes especiales el tiempo invertido en el vuelo (la carrera).
Con los tiempos de las palomas llegadas y comprobadas, se establecen clasificaciones individuales o por equipos.
La mensajera es una raza especial de paloma. Por su viveza, su vuelo especial, su plumaje, su anatomía, es considerada como un auténtico atleta del espacio. En estado natural no se aleja mucho de su palomar. Allí vive, se alimenta y se reproduce. Pero entrenadas y estimuladas convenientemente tienden a recorrer las distancias de los concursos en el menor tiempo posible.
¿QUE UTILIZA LA PALOMA PARA VOLVER?
Posee un esqueleto capaz de resistir el enorme trabajo que desarrollan sus músculos. También están dotadas de una gran rapidez de vuelo, equilibrio armónico de musculatura, plumaje abundante y suave con especiales características para conseguir una mínima resistencia de rozamiento al viento durante el vuelo.
Es de destacar su innato sentido de la orientación.
Todo ello puesto en juego, las hace capaces de volver al palomar atraídas por su pareja, sus crías o simplemente su nido, desde distancias superiores a 700 Km. a unas velocidades de 90 kilómetros por hora o más.