En respuesta a lo ocurrido con la extracción de un caldén y un tala cerca de Huinca, un abogado local fue a la Justicia e interpuso el recurso. En la acción se solicita a los autores la forestación de 200 ejemplares como medida de remediación y la realización de un curso formativo sobre la importancia ecológica y cultural de esta biodiversidad única en el mundo..
Tras la polémica tala de dos árboles nativos; entre ellos, un caldén centenario en Huinca Renancó, ayer un abogado del medio, Luis Sánchez Brandi, interpuso ante el Juzgado de la localidad un recurso de amparo contra el Consorcio Caminero local y el Aeroclub a fin de que “se abstengan de agravar la lesión al ambiente mediante actos concretos de destrucción de especies autóctonas y vulnerables dentro del Departamento General Roca y en especial dentro del Corredor Biogeográfico del Caldén”.
Además en su acción legal, el demandante pide que estas entidades procedan a la recomposición del daño causado al ambiente al “Bosque Protector” ordenando “la forestación, plantación y conservación de doscientos (200) ejemplares como medida de remediación ambiental y la realización de un curso formativo sobre la importancia ecológica del corredor biogeográfico del Caldén”.
Por último, se solicita al juez ordenar “medida de no innovar sobre la totalidad del bosque de Caldén (Prosopis caldenia) existente en el Corredor Biográfico del Caldén –en los límites de su jurisdicción- creado por el art. 2 del Decreto 891/2003 dentro del Departamento General Roca de la provincia de Córdoba como estrategia de ordenamiento territorial y conservación ambiental de una superficie aproximada de seiscientos sesenta y cinco mil hectáreas (665.000 ha.) con límites al norte del Río V (Popopis); al oeste el límite interprovincial con la provincia de San Luis, al límite interprovincial con la provincia de la Pampa y al este ruta nacional 35”.
En su argumento, el abogado señala que las permanentes acciones de tala “vienen afectando sistemáticamente el área de distribución del Caldén en la provincia de Córdoba, quedando en la actualidad alrededor de unas 50 mil hectáreas en buen estado de conservación, lo que marca su estado crítico” y agrega: “Sumado a los hechos egoístas y cuasi criminales –como los descriptos– nos llevan a la conclusión de que el final del bosque nativo se encuentra mucho más cerca de lo imaginado, siendo necesario y de vital importancia la ejecución de acciones judiciales concretas de protección de nuestra biodiversidad”.
Las organizaciones regionales Mamull Mapú y Civil Cañada Verde manifestaron su repudio ante la extracción de los dos ejemplares nativos.
El recurso se sostiene en normativas comprendidas en la Constitución nacional, la violación al decreto provincial 891/2003 que en su artículo 4 clasifica como “Bosque Protector” a los individuos aislados o masas arbóreas existentes en el corredor biogeográfico del Caldén, declarando de interés público la conservación de sus remanentes boscosos y los ambientes naturales que los contienen. Y la afectación de intereses colectivos previstos el art. 5 del Decreto provincial nro.891/2003 que exige “la presentación de estudio de impacto ambiental como requisito previo al desmonte de bosque nativo ubicado dentro del corredor biogeográfico” y finalmente el letrado apela al acuerdo de Escazú “la La Ley 27.566 admite mi intervención al garantizar y determinar la participación pública y el acceso a la justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe (Acuerdo de ESCAZÚ) en donde se determina que todas las personas tienen derecho a: recibir información sobre asuntos ambientales y desarrollo sostenible; participar en los procesos de toma de decisión sobre asuntos ambientales importantes de su país; hacer reclamos ante las autoridades para defender su derecho a vivir en un ambiente sano; realizar acciones sociales y políticas para defender y cuidar el ambiente”.
Proclama de organizaciones ambientalistas
Cabe recordar que las organizaciones regionales Mamull Mapú y Civil Cañada Verde dieron a conocer en las últimas horas una nota que lleva el lema “El caldén no se toca” en relación con la tala de dos ejemplares de árboles nativos que fuera solicitada por el Aeroclub huinquense y avalada por el área de Bosques de la Secretaría de Ambiente de la Provincia. “Se plantea una seria contradicción con los principios de conservación y respeto hacia nuestro patrimonio natural”, señalaron en un pasaje de la misiva.
“La tala de árboles nativos en este entorno, solicitada bajo el pretexto de ‘mejorar la seguridad de las distintas operaciones aeronáuticas’ por parte del Aero Club, plantea una seria contradicción con los principios de conservación y respeto hacia nuestro patrimonio natural. El hecho de querer exponer un remedio o equiparación con los ejemplares extraídos agudiza la falta de criterio institucional y científico porque ningún ejemplar de más de 100 años como lo constatan vecinos, productores y las mismas fotografías de su porte pueden ser reemplazadas por otros ejemplares. No hay reemplazo para un patrimonio integral único e irrepetible que acompañó social, productiva y equilibradamente a nuestras familias, ciudadanías y comunidad”, indican y agregan: “Exhortamos una respuesta que aplique justicia concreta frente a la gravísima situación que no puede volver a repetirse porque justamente ya no quedan ejemplares de esta naturaleza biológica y cultural”.
I. Castro