Se denomina ‘#E-waste la otra cara de la tecnología’. Sumaron nuevas acciones como fijar puntos de recolección de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEEs) que serán donados a la Fundación Garrahan para su reutilización.
La basura electrónica, que incluye desde computadoras obsoletas hasta celulares rotos, representa un desafío global por los materiales tóxicos que pueden liberarse si no se gestionan correctamente. Movilizados por este problema ecológico mundial, los estudiantes del Instituto San José, ubicado en Quines, trabajan en un innovador proyecto sobre el tratamiento de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEEs).
La iniciativa, que lleva por nombre ‘#E-waste: la otra cara de la tecnología’, nació en 2016, busca concientizar sobre el impacto negativo que tiene en el ambiente y el bienestar de la población el manejo inadecuado de restos de tecnología. Cuenta con la guía y apoyo de docentes de las materias Educación Tecnológica y Biología, ahora se suma el acompañamiento y capacitación de Danilo Gianello, integrante de la secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable.
El compromiso asumido fue disparador de nuevas acciones, entre ellas, establecer puntos estratégicos de recolección de RAEEs, que luego serán donados al programa de Reciclado y Medio Ambiente de la Fundación Garrahan para su reutilización.
El ambicioso proyecto de los estudiantes cuenta además, con un abordaje de imágenes satelitales para identificar depósitos clandestinos de basura electrónica, una actividad crucial para entender la magnitud del problema. Durante esta investigación, los jóvenes observaron que muchos vecinos siguen desechando residuos en lugares inadecuados, a pesar de contar con servicios de recolección y con la planta de tratamiento y reciclado ‘La Jarilla’, ubicada al ingreso a la localidad.