Una numerosa cantidad de vecinos y vecinas se concentró en la noche de este martes en las afueras del hospital Pedro Moguillansky, donde permanece internada María Agustina Fernández, la joven a quien le diagnosticaron muerte cerebral producto de los golpes recibidos durante un robo.
La convocatoria al encuentro se conoció en horas de la tarde y tuvo como objetivo abrazar de manera simbólica a los papas de la víctima, estudiante de medicina de solo 19 años, y reclamar el esclarecimiento del violento ataque.
La mayoría concurrió con velas que se encendieron al inicio de la emotiva ceremonia y dejaron colocadas en el acceso al edificio sanitario.
Agustina había llegado de La Pampa para estudiar Medicina, carrera que se dicta en la Universidad Nacional del Comahue.
El sábado por la noche estaba en la casa de un amigo, vecino del mismo complejo de departamentos donde alquilaba. En un momento dado el muchacho salió a realizar compras. Cuando regresó alrededor de las 22:20 se encontró con la joven en el piso en medio de un charco de sangre.
En los primeros pasos de la investigación se detectó que el faltante de dos teléfonos celulares y un monto de dinero estimado en 1.000 dólares.
De allí que la fiscalía tenga como principal hipótesis el robo.
Fuentes de la dependencia judicial no brindaron detalles en cuanto al avance de la pesquisa. Argumentaron que es para no entorpecer el trabajo investigativo. “Se sigue trabajando como desde el primer minuto”, destacaron desde el Ministerio Público Fiscal.
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